lunes, 26 de marzo de 2007

61 días y lleno de virus...

Hola a todos.

Me encuentro fatal. No he dormido en toda la noche, porque tengo a mi padre malo y encima estoy peor del catarro. ¡Qué mal duermo las noches de los domingos! ¡Menos mal que no me caso en lunes!

Ayer fue un día bastante bueno. El rito de mis chicos salió muy bien. Además, estuvieron arropados por todos los que formamos la ‘parroquia obrera’, vamos, por todos los que curramos. La comida fue muy divertida y me pude ver reflejado en alguno de mis catecúmenos cuando yo tenía esa edad. ¡Qué edad más bonita para recordar!

Después, al volver al barrio, y pasar por mi casa para comprobar que la putada del Supermanager no había sido un mal sueño (¡Cagontó!), llamamos a MariJose, la mujer de Oscar, ya que nos acordamos de que trabajaba en un agencia de viajes, y hemos quedado en llamarnos para ver si nos puede ayudar en lo del viaje. ¡Ojalá!

Ya tenemos también el mapa escaneado. A ver si tengo tiempo hoy, porque tengo que ir a por los papeles de las invitaciones, y monto el mapa para hacer las fotocopias en color que irán dentro de las invitaciones. Y a ver si os respondo a muchos de vosotros los correos que me mandáis, porque no doy para más.

Para terminar deseadnos suerte, porque hoy comenzamos los cursos prematrimoniales.
Espero no conocer a nadie...

Hasta mañana.

4 comentarios:

Unknown dijo...

O sea que al final haces los cursillos prematrimoniales... ¡esquirol!

Unknown dijo...

Por cierto, prepara la espada, que te va a hacer falta... XD

Alvarito dijo...

Hay que ver qué nivel de frikismo: he tenido que leerme las entradas de los días anteriores para enterarme de qué era eso de la supermanager, y lo que te había pasado. Pero sigo sin entenderlo bien...

¿La casulla morada no era llamada también "alba galáctica"?

Pues dos cosas:
a) Tiene buena pinta el viaje.
b) Mejor coger ese catarro ahora, ¿no?

EL NOVIO dijo...

El catarro no es bueno cogerlo nunca, porque no te puedes ni imaginar la cara que tengo.

Lo del Supermanager... De verdad, déjalo, que se pone una mala leche de impresión.

Por cierto, en el trabajo hay dos, a los que les estaba dando por culo, que no me hablan. Por otras fuentes he descubierto que temen que pida que todos puntúen cero otra semana o que me sumen los puntos. Eso es que no me conocen.

En la vida hay que encontrarlo con todo tipo de gentes, pero esto viene bien para conocer la naturaleza de cada uno...