
Hola a todos.
Aunque parezca que tengo miedo de que se acabe el tiempo, yo pagaría porque fuera mañana y se acabara esta lenta agonía... Es como la fábula del lobo, que viene, que viene y nada...
Ayer por fin terminamos con los cursillos prematrimoniales. Al final nadie nos preguntó sobre lo que opinábamos de ellos, pero dio igual, porque nos metimos en el despacho y delante de los tres curas de la parroquia nos quedamos muy muy a gusto. La de ayer estuvo muy bien, Pedro se portó como un campeón y, además, nos echó un cable delante de todos los compañeros (no voy a decir más lo de ateos, porque creo que está más claro que el agua). Ya sabréis todos el complejo de 'anormales' que nos crearon delante de todos el conejo y la coneja. Pero ayer Pedro nos quitó el estigma, porque hizo varias bromas conmigo de protagonista, que, aunque me hicieron sonrojar, sí hicieron aparecer miradas de complicidad y también, por qué no, de relajación en los demás, ya que, por primera vez, nadie les estaba juzgando. La culpa no es suya, es de la Iglesia que lo permite. Y eso es algo que, los que va a dar las charlas, debería tener muy claro.
Debido a que todo está al retortero y hoy vamos a ir a colocar el trastero, a ver si dejamos claro ya de una vez lo que queremos dejar allí y lo que no, pues voy a hablar estos días de hobbies, se puede llamar así, que a Maria y a mí nos ha gustado hacer durante estos años de relación. NOOOOOOOOOO... DE ESO NO VOY A HABLAR....
Una cosa que nos ha gustado mucho y que no hemos hecho más porque es carillo, ha sido ir al baloncesto. Y diréis, pues podías haber puesto otra cosa. Tenéis razón, pero es que esta es más corta, y hoy ya he contado más cosas... que luego me dais la charla...
Probamos una vez en un Estudiantes-Madrid y a Maria le encantó. Yo tenía miedo de que no el gustara, pero disfrutó mucho. Le gustó el ambiente, la velocidad del juego y, sorprendentemente, el juego en sí. También ayudó el que no llevaba una idea previa concebida, porque yo sólo le había dicho que quería ir, no de lo que se iba a encontrar allí. Además, como el fútbol no el gustó demasiado, eso también fue un factor a favor.
Después hemos ido a ver un Estudiantes-Pamesa, Estudiantes-Barcelona (que fue el más le gustó porque vio a su jugador favorito, que es Juan Carlos Navarro, de ahí la foto), Estudiantes-Fuenlabrada. Y hasta ahí, todo derrotas. Yo ya empezaba a pensar que era gafe, pero mira por donde, el año pasado fuimos a ver Estudiantes-Etosa y Estudiantes-Caja San Fernando y ganamos los dos. Con lo que yo podemos ir los dos más que tranquilos. Si gana, gana y si pierde, pues pierde... En uno de esos partidos, pude hablar con Pepu Hernández. Creo que me puse tan nervioso que no me salían las palabras. Él estuvo muy educado y muy simpático. Lo que más me mola de su forma de ser son tres cosas que me hacen sentir admiración: Vive el baloncesto, cree en el juego en equipo y es profundamente antimadridista.
También hemos ido a ver a la selección española en el torneo de la Comunidad de Madrid de agosto y me quedé flipado cuando se emocionó al ver a Gasol y compañía...
Para mí, qué decir tiene, que, el hecho de que a Maria le guste el baloncesto es muy tranquilizador, porque es mi hobbie preferido.
Bueno, pues hasta mañana. Domingo de Ramos. No se os olvide estrenar algo.